Antonio Andújar ha publicado hoy en su blog un post sobre la tarea del emprendedor. Y me ha hecho gracia, más que nada, porque todo lo que cuenta en él ha sido mi pan de cada día durante los tres últimos meses.
Hoy, por fin, es mi primer día como autónoma. Ya sé que me tocará trabajar algunos domingos y festivos; que, seguramente, algunos días laborables me quedaré "colgada" sin nada que hacer; que trabajar en casa tiene sus pros y sus contras; pero, ¿qué se le va a hacer?
Tenía claro que no quería cambiar de profesión, y que "de lo mío", tal como están las cosas, mucho no iba a encontrar, y menos aún en una gran empresa y con un contrato, como mínimo, igual al anterior. Así pues, montándomelo por mi cuenta, sin depender de nadie (salvo de mis clientes), me lanzo a la piscina.
Con un poco de suerte, el año que viene habrá algún viajecito... como recompensa. Crucemos los dedos.
Y por si te animas a leer el post de Antonio, empieza así:
Continuamente me encuentro peticiones en twitter de gente que busca desesperadamente un trabajo. Es una situación que vivimos de cerca, todos tenemos algún conocido que está buscando un puesto fijo en una empresa sólida. Lo que no es fácil de reconocer es a la gente que está en el paro y se decide a crear su propio empleo en vez de suplicar por uno.
Estar en el paro significa un abanico de oportunidades. Sea cual sea tu actividad, si no tienes empleo y estas cobrando de la ayuda del estado, es el mejor momento para decidirte a emprender. ¿Tienes miedo? La respuesta es bien sencilla, más miedo tiene la gente que deja su trabajo para dedicarse a montar su propio negocio. Sigue leyendo.
Archivado en: Trabajar, de vez en cuando
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