Los televisores de plasma, un poco más caros en Francia

El próximo mes de enero, los franceses verán aplicada la tasa del "bonus-malus" a una serie de artículos de gran consumo. Este impuesto ecológico, que ya se aplica a los vehículos, afectará también a una veintena de productos de consumo doméstico.

El impuesto ecológico se aplicará a los televisores de LCD y de plasma a partir del 1 de enero del próximo año y la tasa variará según el consumo eléctrico de cada aparato.

Según un artículo del diario francés Le Parisien, los más de seis millones de televisores que se venden en Francia cada año se dividirán en cinco grupos, según el tamaño de la pantalla y la cantidad de electricidad que consuman. Así, los televisores de plasma y LCD tendrán una “sanción” de entre el 7 y el 15 % del precio de venta, según la cantidad de energía que consuman. En total, unos 100 € de incremento sobre el precio final del producto, importe que deberán pagar los fabricantes, quienes lo abonarán al Estado a través de la TGAP, la tasa general sobre actividades contaminantes. Sin duda, también lo aplicarán al producto final.

El ministro francés de Ecología dice que no es un impuesto, sino una manera de promover el ahorro energético y animar a la gente a comprar productos más ecológicos. Aun así, el Gobierno recaudará unos 150 millones de euros que, en teoría, servirán para financiar un sistema de cheques que recibirán los compradores de aparatos “verdes”, como recompensa por utilizar productos más respetuosos con el medio ambiente.

A partir de ahora, los fabricantes deberán incluir en el etiquetado del producto los datos de consumo de electricidad del aparato. Primero los vehículos y ahora los televisores; más tarde, frigoríficos, bombillas y una serie de electrodomésticos de consumo doméstico pagarán también esta tasa. De momento, sólo en Francia. Aunque aquí en España, tan amantes del “culo veo, culo quiero”, ¿cuánto tardarán en copiarla?

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